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  • Terapia Floral – Supervisión de casos clínicos

La Danza de Adán y el peso de los metales.

La  Danza de Adán y el peso de los metales.

Autor: Rodrigo Negrete, Comunicador Social y Terapeuta Floral.

E-mail rnegretes@gmail.com

Es muy probable que muchos de los que están ahora leyendo este artículo, se preguntaran cual es la tarea o función terapéutica  de los metales combinada con las esencias florales de cactus de la familia Cereus. Pues en virtud de mi propio interés por ensanchar aún más los límites de mi estudio y comprensión, acerca de esta noble tarea que es la sanación mediante remedios florales, encontré las siguientes definiciones, relativo a la importancia de trabajar con los elixires de metales.

Aunque no nos guste aceptarlo, se recurre a las propiedades terapéuticas de las piedras o minerales y sus estructuras cristalinas, cuando ya no nos sentimos dueños de nuestra propia vida. En otros términos, cuando nos enfrentamos a problemas o dificultades aparentemente sin salida que provocan malestar, tanto a nivel físico, como mental o emocional, dicho de otro modo, algo así como un sentimiento de callejón sin salida, sin saber a dónde ir o estado de crisis sin sentido.

Solamente nosotros podemos saber cuándo estamos insatisfechos de la vida que llevamos, y cuando pues, precisamos introducir cambios en ella. En este sentido me sorprende la sincronicidad de la prescripción de estos elixires, con mi propio proceso personal, no solo como terapeuta, sino que también como consultante de las mismas, bajo la supervisión de un experimentado consejero floral.

¿Que busca despertar esta experiencia? La finalidad de este proceso terapéutico, es volver a tomar el control de la propia vida, mientras se encuentra la solución a los problemas, superando las dificultades y logrando finalmente el equilibrio interior.

De acuerdo a lo investigado, algunos de estos metales juegan también un importante papel en la transmisión de impulsos nerviosos y, por consiguiente, en las actividades de cognición, percepción y motoras. Incluso el “re-equilibrio” de niveles de fluidos del cuerpo (que influye en la calidad de la sangre y de otros fluidos del metabolismo), depende directamente de la presencia de varios minerales.

Por otra parte otro de los conceptos involucrados con este modelo de sanación, es la  Spagyria, pero qué es.

El asunto de la spagyria asocia directamente la figura de Paracelso, el alquimista medieval que buscaba afanosamente la piedra filosofal y la transmutación en oro de los metales. Él mismo decía que: “La alquimia tiene por cometido la obtención de medicamentos y no la preparación de oro y plata”.

Paracelso perfeccionó la alquimia y la convirtió en Spagyria, palabra que se refiere a la extracción o separación del proceso de elaboración del fármaco y luego al proceso de recombinación. De hecho, la palabra Spagyria (que proviene del griego “spaô”, “extraer” y “ageirô” reunir), se le atribuye a Paracelso en su libro Opus Paramirum:“…por eso aprende la Alquimia, que de otro modo es llamada Spagyria, ella enseña a separar lo falso de lo justo”.

Hoy en día se sabe científicamente la influencia que los planetas ejercen sobre la Tierra. La Spagyria ya contaba con esto desde hace miles de años. Los planetas y metales están directamente relacionados y éstos con las plantas. Por ejemplo: El Sol con el oro, la Luna con la plata, Venus con el cobre, Mercurio con el mercurio, Marte con el hierro, Júpiter con el estaño y Saturno con el plomo.

Los preparados de Spagyria son muy complejos y laboriosos de realizar. Se componen de tinturas principalmente vegetales obtenidas en fechas determinadas de acuerdo a las influencias astrológicas.

Tenemos que recolectar las plantas a mano y ponerlas a macerar bajo los influjos lunares y solares para que la planta absorba, a nivel energético y electromagnético, la influencia que estos dos astros ejercen sobre nuestro planeta.

Según su metodología, cuando se recogen las plantas o flores al alba se colocaban manteniendo el rocío de la mañana en un recipiente de cristal transparente, y se cerraba de forma hermética para que los rayos solares pudieran llegar a las flores o planta. Es muy importante cerrar para que el rocío no escape, no se evapore y se pierda así el Espíritu Mundi (espíritu de la Naturaleza).

A la tintura de la planta se le añade la ceniza de la planta ya calcinada. La justificación original para estas tinturas especiales a base de plantas parece haber sido que, utilizando sólo un extracto de alcohol no se puede esperar que contengan todas las propiedades medicinales de una planta viva, y lo que trata este sistema es que el componente mineral de la planta sea quemado, preparado por separado y luego vuelto a añadir para ‘potenciar’ la tintura alcohólica.

En relación a las esencias que forman parte del sistema La Danza de Adán, estas vienen combinadas con los siguientes elementos: Urano – Zinc, Hades – Bismuto, Hefestos  – Oak, Apolo – Oro, Cronos – Plomo, Hermes – Mercurio, Teseo – Plata, Dionisio – Cobre, Neptuno – Cobalto, Edipo – Antimonio, Zeus – Estaño y Urano – Zinc.